martes, 20 de diciembre de 2011

LAS AGENCIAS DE CALIFICACIÓN

Por: Xochitl


Me he puesto a escribir con la intención de hacer algo navideño pero no he tenido éxito.
Eso se debe a que hace unos días me topé con un artículo que hablaba de las agencias de calificación y que me ha parecido de esas informaciones que todos deberíamos leer.
Se trata de un texto publicado por "El País" el 15 de diciembre, extraído del New York Times y titulado "Los errores de Moody´s sobre Grecia"; en él se hace referencia a un informe realizado por el alemán Wolf Klinz, miembro del Parlamento Europeo, en el año 2010 en el que critica el funcionamiento de estas agencias.
Haciendo un poco de memoria nos cuenta como ya en el año 2001 las tres principales agencias calificaron a Enron como "apta para la inversión" y tan sólo unos días después ésta se declaró en quiebra. El artículo continua centrándose en el caso concreto de Gracia, diciendo que pagaba a Moody´s para que calificase su deuda lo que llevó al país a un aumento de su endeudamiento, debido precisamente a las altas calificaciones que se otorgaban.
Si el propio FMI ha hablado del fracaso de estas agencias es complicado entender por qué seguimos levantándonos todas las mañanas con el temor de sus calificaciones.
Parece ser que al igual que el mercado del que forman parte y que parece "legitimizarlas", hagan lo que hagan, les encantan los términos como optimismo, confianza o suposición y la verdad es que pone los pelos de punta pensar que estamos en sus manos. ¿Y ellas, en manos de quienes están realmente?

miércoles, 7 de diciembre de 2011

SUDORES POLÍTICOS

En la Feria del libro de Guadalajara (México) le preguntaron al político mexicano Enrique Peña Nieto, candidato por el PRI a la presidencia de la República por sus tres libros favoritos. La respuesta fue que en primer lugar algunos pasajes de La Biblia, en segundo, La silla del águila pero equivocó al autor y en vez de decir Carlos Fuentes le salió Enrique Krauze. Para el terecer puesto no es difícil adivinar que simplemente ya no le salió ningún título,  pero comenzaba a sentir sudores.
Eso sí, su "discurso" se convirtió en un ejercicio de divagación que no encontró la salida de emergencia.

Para saber más sobre el tema:



viernes, 2 de diciembre de 2011

MENTE DIABOLICA


Autor:Yudiel Pérez Espejo
Dibujo: Yudiel Pérez Garza


México





Inspirado por la luna y motivado por el sexo, Rramón cantaba, cuando un certero zapatazo le hizo desafinar y caer del tejado. Al pie del muro, Rrodrigo, Rrené y Rrigoberto contemplaban con pena los esfuerzos de Rramón por levantarse.

- Pobre Rramón, dijo Rrodrigo.

- Tan desamparado, dijo Rrené.

- Tan flaco y tan feo, dijo Rrigoberto.

Ante tanta manifestación de lástima, Rramón reaccionó con orgullo, se incorporó y les dijo:

- Así es la vida, pequeños, cuando tengan mi edad lo comprenderán y lo tomarán como un detalle más que le da sabor a la existencia.

- No Rramón, contestó Rrodrigo, nosotros nunca sufriremos como tú. Al ser pequeños y lindos, una dulce viejecita nos va a adoptar.

-Cuídense de las dulces viejecitas, les advirtió Rramón, -tienen la costumbre de cortar los órganos más nobles a los gatitos lindos para hacerlos sumisos y cretinos, los confinan en instalaciones asfixiantes y confortables y los destinan a saciar sus aberrantes instintos maternales por el resto de sus vidas.

Rrené le contestó apoyado por sus hermanos:

- El hambre y la envidia te hacen inventar terribles historias que sólo una mente infernal como la tuya puede imaginar. Y se marcharon indignados.

Rramón continuó con su vida bohemia, cantando a pesar del hambre y recibiendo por su arte a veces delicias, a veces zapatazos. Parrandeaba libremente por las noches y evitaba el día, porque el contacto con las masas humanas le recordaba la triste suerte de sus incrédulos amiguitos.




martes, 29 de noviembre de 2011

ENTRE LOS LODOS

El ave se acercó cautelosamente,





y le preguntó a la silla:

-¿Pero qué haces aquí entre los lodos?



La silla no le respondió, se limitó

a admirar el sol que la calentaba

mientras esperaba resignada

la subida de las aguas.


Por: Xochitl
Irún-Guipúzcoa

viernes, 25 de noviembre de 2011

TESORO



Mi mamá llega a casa con una bolsa sospechosamente preciosa en la mano.
Yo observo atenta cada movimiento que hace, desde cómo se sienta en el sofá hasta cómo coloca la bolsa sobre el suelo que parece un espejo rojo.
Ella se enreda hablando con mi tía, su hermana, que se ha quedado para cuidarme. La bolsa sigue cerrada, sobre el suelo frío, casi ausente.
Comentan entre ellas los detalles de mi fiesta de cumpleaños que celebraremos el sábado. Me caen cuatro, así que miro los dedos de mi mano derecha y pienso que casi se ha completado, me siento muy mayor.
La bolsa continúa en el suelo y yo comienzo a desesperarme.
Mi tía saca del armario el traje que me ha hecho la abuela para mi fiesta. Iremos todos disfrazados. Se trata de un vestido de gitana, rojo con lunares blancos, grandes y muchos volantes y flecos.
De una caja de zapatos viejos saca mi madre una peineta de plástico que también es roja y unos pendientes enormes que cuelgan.
Yo los cojo y me los pongo porque puedo sola, delante del espejo y me miro y me vuelvo a mirar.
Pero la bolsa se refleja en el espejo y despista mi juego esperando ser descubierta.
Doy media vuelta muy despacito, con un pendiente aún colgando del lóbulo izquierdo y me acerco sigilosamente hacia el tesoro.
Madre y tía se han ido a la cocina y las oigo hablar a lo lejos pero no me interesa lo que dicen.
La bolsa queda a mis pies y su suerte a mi voluntad; conozco el contenido pero me da igual y un cosquilleo sube por mi cuerpo y mientras alargo los brazos y estiro mis dedos parece que éstos se han dormido. ¡No! Cómo se van a dormir en un momento así.
Por fin cojo la bolsa y la coloco sobre mis piernas al tiempo que me siento en ese suelo tan frío y tan rojo.
Es realmente una hermosa bolsa de plástico. No sé bien lo que pone pero distingo algunas letras. Dentro hay una caja alargada, bellísima también. La abro allí mismo, sin sacarla de la bolsa y ahí están mis zapatos de cumpleaños, mis zapatos rojos.

lunes, 21 de noviembre de 2011

EL MÉTODO DE LA BOLA DE NIEVE

Por: Xochitl




Generalmente no estoy pendiente de las conversaciones ajenas, sin embargo, esta mañana, al cruzarme con dos mujeres que venían de frente y que hablaban entre ellas, una frase se quedó varada en mi cabeza: “Hay mucho trabajo, pero no están pagando”.
Por un momento me sentí como uno de los ángeles de El cielo sobre Berlín que poseían el don de “escuchar” los pensamientos de las personas.
Tal vez la frase no me hubiese resultado tan llamativa si antes no hubiese conversado con una amiga que precisamente me contaba de sus penurias laborales. A estas fechas del mes y aún no había cobrado su nómina, además le deben parte de su paga extra y algunas suplencias. Esto me recordó al método de la bola de nieve, muy antiguo y conocido por algunos y sufrido por otros tantos. Consiste en algo muy obvio, la bola de nieve va rodando y se va haciendo cada vez más grande como la deuda que algunos contraen con sus trabajadores.
Hace ya muchos años algo parecido me ocurrió a mí. Trabajé para un tipejo cuyo sistema laboral se basaba en la bola de nieve. Con este sistema uno se ve “obligado a trabajar” para poder cobrar lo que te deben pero como uno sigue trabajando, la deuda sigue creciendo. Para tenerte sujeto te van pagando poquito a poco pero nunca se ve la luz al final del túnel. En mi caso, la historia terminó con un cheque sin fondos que por cierto genera gastos.
El panorama laboral desde entonces ha cambiado y hoy, además, contamos con La Crisis como personaje estelar. La Crisis es culpable de numerosos despidos pero hay otros casos en los que parece que se saca provecho de esta situación para aplicar “reformas laborales” en negocios y empresas que no están pasando apuros, simplemente viene bien hacerlo y se cuenta con un pretexto de peso. En algunos casos, los que han conservado su puesto de trabajo, privilegiados ellos, han tenido que absorber el hueco dejado por el trabajador que ya no está, lo que se traduce en más trabajo.
La cosa pinta mal. Ahora el método de la bola de nieve, entre otros, parece más justificado que nunca pues como todo va mal hay que hacer un esfuerzo generalizado. Y esfuerzo, no cabe duda, hay que hacer, pero no hay derecho a que algunos se aprovechen de una situación como ésta y jueguen con el dinero que tanta falta hace.


miércoles, 16 de noviembre de 2011

¿UN OTOÑO DISFRAZADO DE VERANO?

Supongo que la mayoría de los que paseamos por la Bahía de Txingudi, -para los que no la sitúen, País vasco-francés-, estamos felices por poder disfrutar de la playa en estos días ya entrados en el mes de noviembre. También se puede pasear por el monte o tomar cafecito en alguna terraza al aire libre. Nada de esto es habitual por esta zona del planeta y en estas fechas. Tampoco lo es observar que el termómetro ha llegado a los 26 o 27 grados centígrados.
Con este panorama incluso hay florecillas que han decidido asomar de sus capullos tardíos y algunas parejas disfrutan de los bancos en los parques como si fuese primavera.
¿Será que el clima realmente está cambiando y lo que conocíamos como las cuatro estaciones de toda la vida ya no se corresponde con la realidad? Los vendedores de ropa no lo tienen nada claro. Ellos que son grandes seguidores del tiempo, como antaño lo era la gente del campo, constatan estación tras estación que todo parece mucho más mezclado, más confuso. Es por ello que no saben si dejar algunas camisetas de tirantes pendientes de mostrarse en el escaparate, según brille el sol y por si acaso alguna prenda de abrigo, aunque sea ligera, para arropar a los maniquíes en los supuestos meses de verano. Puede que esto sea lo más inteligente.


                                            Hendaya, 13 de noviembre de 2011.
                                      

sábado, 12 de noviembre de 2011

11 del 11 del 11




No me tocó la lotería. La verdad es que tampoco estuve muy pendiente del sorteo pero no puedo negar lo atractivo y sobre todo la efímera ilusión que supone poseer un billetito con estas características: once premios de un millón de euros y uno de once millones, casi nada, además de otros premios menores.
El sorteo se celebra en un momento de especial sensibilidad -por decirlo con cierta elegancia- en el que hay mucha gente pasándolo realmente mal, sin trabajo ni perspectivas de tenerlo y con riesgo de perder sus hogares. Momento en el que el “bienestar europeo” conseguido se tambalea y la política y las instituciones no están a la altura de las necesidades de la sociedad.
Pero es justo en este instante cuando una ilusión con forma de papelito insignificante viene a darnos, aunque sea tan sólo por unos segundos, casi lo que dura un caramelo en la boca de un niño, la posibilidad de soñar y pensar que tal vez, por qué no, lo podríamos tener todo solucionado.
Mientras tanto, en parte de Europa se realiza otro tipo de celebración, la conmemoración del fin de la Primera Guerra Mundial con amapolas en la solapa.

Xtl

miércoles, 9 de noviembre de 2011

EL VIENTO

De alguna manera me doy cuenta de que me andas rondando.
Apareces sutil, limpio, invisible, por sorpresa, sin pedir permiso y así sin más me envuelves, me invades y traspasas uno a uno mis límites, ésos que tan sólo permito en ocasiones contadas, cuando voy a alguna ciudad de las grandes y me subo al metro en hora punta.

Me levanto muy despacio y abro la ventana para escucharte mejor. Me despeinas, sin ningún tipo de vergüenza, no tienes ni idea de lo que es el pudor.


De repente te disfrazas de Eolo y te vuelves poderoso y altivo; vas de menos a más, te elevas, revoloteas como mariposita. Luego te haces menos, como una brisa casi imperceptible, jugamos al escondite y sí, sigues aquí. Eres tú el que decides con quién estar y a quién asustar; qué puertas y ventanas azotar con una pequeña ráfaga, qué tejas y macetas tirar de algún balcón confiado.


Te duele que ya no seamos capaces de recordar, como antiguamente, allá en el campo, tus mil nombres y los males que a ellos se asociaban. Has perdido ese respeto y aunque siguieses teniendo el poder de adueñarte de la voluntad de las personas, de sus arrebatos, hoy más bien se habla de que puedes producir un pequeño mareo, dolor de cabeza o tal vez despertar un amor loco, una pasión desenfrenada.


Sé que me tengo que cuidar de ti, sobre todo si pareces enfadado con el mundo y hay momentos en que sí que lo estás. Primero susurras delicado al oído incauto para luego rugir sin compasión en un concierto del que eres el único instrumento.


Te puede la soberbia de un dios, incluso la ira. Te tornas pegón sin motivo, como el niño de tres años que no es capaz de entender el daño que puede causar. Simplemente te diviertes. Y levantas olas mareando al mismísimo mar o muy creativo tú, construyes remolinos que se tragan casas, personas y pueblos enteros.


Cuando ya no puedes con tanta risa decides parar, un poco fatigado tal vez y pasas a admirar tu gran obra. Sin que nadie lo espere lloras arrepentido, no te gusta lo que contemplas y tú, tan etéreo, sientes nauseas.



Para desgracia del mundo eres un completo desmemoriado, careces de recuerdos, ni tan siquiera sabes que una vez fuiste pequeño y que tuviste una madre. Pero tu vacío tan sólo lo sientes y es por eso que haces lo que haces y que eres como eres.

Foto: Consecuencia del primer temporal del otoño en Hendaya.